domingo, 1 de marzo de 2015

Una breve exhortación europeista y "glocalista" con ocasión de un acto de Podemos Don Benito




Esta carta fue leída durante el acto del sábado  de febrero por el compañero Javier Acedo del círculo Podemos de Orellana de la Vieja:

"Queridos compañeros y compañeras. Os escribo desde Bruselas, donde hoy mismo sigue la batalla por la dignidad del pueblo griego y la libertad y dignidad de todos los pueblos de Europa. Hoy, el compañero Yanis Varoufakis volverá a enfrentarse a la Bestia, a la que algunos ponen cara de cancillera alemana, o de ministro federal de finanzas del mismo país, pero que, según fuentes de prensa cercanas a las instituciones europeas, tiene barba, boca de sentina y cara de lelo. Fue, en efecto Mariano Rajoy -lo habréis reconocido enseguida- quien, más aún que los propios alemanes, se opuso al compromiso propuesto por la Comisión Europea, que Varoufakis estaba dispuesto a firmar: la aceptación formal de la parte financiera del rescate, sin las condiciones que implicaban el mantenimiento de medidas de austeridad perjudiciales para la población. Era un compromiso sensato, pero Rajoy, temiendo que este arrebato de sentido común entre los socios europeos reforzase la posición de Podemos, lo rechazó de llano. La casta europea tiene miedo: los más prudentes lo manifiestan cediendo a algunas exigencias populares, pero los más tontos y extremistas como nuestro presidente de plasma prefieren enrocarse en fórmulas derrotadas y superadas.

Es preciso que hoy este mensaje llegue a todos, en todos los puntos de la geografía europea. Lo que está pasando hoy en Bruselas, lo que hoy pasa en Atenas, guarda directamente relación con la vida y los problemas de todos los ciudadanos de Europa. La casta lo sabe, Rajoy lo sabe. El gobierno popular griego lo entiende perfectamente. De hecho, antes de ser primer ministro, Alexis Tsipras comprendió muy rápidamente que tenía que apoyar simbólicamente la Renta Básica en Extremadura. Bastaron dos breves explicaciones sobre la situación de vuestra Extremadura -tan parecida a la de Grecia- y la necesidad de una renta básica para que se hiciera con la compañera Lola Sánchez y conmigo la foto que seguramente conocéis y que ha ido circulando por las redes. Decía Pablo Echenique con gran acierto que las últimas elecciones griegas eran la primera ronda de las españolas. Puede decirse también que el gobierno griego es el primer gobierno que hemos conquistado los pueblos europeos. Un gobierno que desde el primer día ha tomado medidas indispensables y sigue adoptando otras muchas, las mismas medidas que queremos ver aplicadas en nuestro país: electricidad gratis para las 300.000 personas que estaban privadas de ella, defensa incondicional de la primera vivienda contra los desahucios, anulación de los despidos ilegales en la administración, nacionalidad griega para los hijos de inmigrantes, cierre de los CIEs.

Hay quien dice que esto es poco, pero Syriza está cumpliendo puntualmente su programa, lo cual es algo insólito en nuestra Europa actual. Solo cederá en la negociación con los socios europeos en aspectos que le permitan seguir aplicando el programa urgente de salvación ciudadana. El corazón de la gente decente de Europa late con el de nuestros hermanos y hermanas de Grecia y existe hoy un hilo de afectos que conecta secretamente Don Benito con Atenas, con Bruselas y con el pueblito del compañero Manolis Glezos en su isla de Naxos. Decían los dirigentes de la casta europea que no puede haber una federación democrática en Europa, porque no existe un pueblo europeo. Lamento decepcionar a estos importantes señores, pero hoy está naciendo ese pueblo y pronto, como tal, estará exigiendo con una sola voz sus derechos. Estarùa exigiendo que la casta se vaya, que la luz disuelva a los vampiros.

Aprovecho también esta intervención a distancia para saludar a un querido amigo que visita hoy Don Benito, al compañero Miguel Urbán con el que comparto tantas cosas importantes, las fundamentales, en relación con Podemos, con la política en general, pero también con esa ética de la decencia común y de la amistad política que él siempre ha mantenido apesar de todas las dificultades y sinsabores. Miguel es una persona indispensable para Podemos y para la renovación de la política en nuestro país. Le mando desde la lluviosa Bruselas un fuerte abrazo. Otro fuerte abrazo para mi querido amigo y admirado compañero Jónatham Moriche, quien después de algunas discrepancias iniciales, y con las reservas de toda persona libre e inteligente, se embarcó en el proyecto de Podemos con todo el inmenso empeño del que es capaz. Con toda su honradez y hasta su tozudez. Un abrazo, para finalizar, a todos los compañeros y compañeras de Don Benito con los que me trato a menudo por medios electrónicos y que me gustaría poder conocer muy pronto personalmente. Syriza, Podemos, Venceremos! Hasta siempre!"